Lechuga Romana

Propiedades de la Lechuga Romana

La lechuga romana es una de las hortalizas de mayor consumo en el mundo.  Se destaca por su alto contenido de agua (sobre un 90% del contenido de la lechuga), al igual que por su nivel de minerales y vitaminas, que se concentra en las hojas más externas.  Su bajo contenido calórico es resultado de la ausencia de grasas, hidratos de carbono, colesterol y sodio de este alimento.  La lechuga romana es fuente de ácido fólico, vitamina que desempeña funciones importantes en distintos procesos metabólicos.; de igual manera, es necesario para la producción de células.  Otras vitaminas que abundan en este alimento son la vitamina B1, vitamina B2 y vitamina B6.  Sin embargo, se destaca sobre todo por su contenido en vitamina A, vitamina C y vitamina E.

Beneficios de la Lechuga Romana

Gracias a las vitaminas y minerales que se encuentran en la lechuga romana, es de beneficio para el fortalecimiento de las defensas del cuerpo y nos ayuda a prevenir resfriados.  Por otra parte, su contenido de vitamina A ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, los  huesos, el cabello, la visión y la piel.  También la vitamina E en este alimento actúa como antioxidante, además de ayudar al sistema circulatorio estabilizando los niveles de colesterol.  Estudios demuestran que ayuda en la prevención del Parkinson.  Otro de los beneficios que se le atribuye a este alimento, dado su contenido de hierro, es su intervención en la actividad enzimática.